El apagón del sábado se debió a un sabotaje

Desde la Dirección Provincial de Energía se informó que tras el corte del servicio se encontró cerrada una llave que alimenta la válvula de gas, ubicada en la subestación que Camuzzi Gas del Sur tiene en el predio de la Central Termoeléctrica, y que “el corte abrupto del gas dañó el motor de arranque de la principal turbina, por lo que el suministro de energía en la ciudad se está brindando con maquinarias más pequeñas”. Se adelantó que “se hará denuncia penal por el hecho” y que “no se descartan cortes rotativos”.

Las autoridades de la Dirección Provincial de Energía denunciaron que el corte del suministro eléctrico del sábado por la noche, en Ushuaia, se debió a un sabotaje en la Central Termoeléctrica y alertaron que, además de la interrupción del servicio, el hecho provocó la avería de la turbina Rolls Royce.

El suministro de energía se está brindando con las máquinas de menor tamaño que posee la entidad, hasta tanto se pueda reparar la turbina principal, por lo que no se descartaron cortes rotativos “en caso de que la demanda supere la capacidad de generación que ahora se tiene”.

Desde la DPE confirmaron que alguien ingresó a la subestación que tiene Camuzzi Gas del Sur en el predio de la Central, y bajó una de las llaves de paso de gas, provocando la salida de servicio de la turbina. El corte abrupto dañó el motor de arranque de la Rolls Royce, puesto que cuando se repuso el suministro de gas comenzó a registrar inconvenientes que no se pudieron solucionar hasta ahora. Ante esta situación se prepara una presentación penal para que se investigue y determinar a los responsables del ilícito.

Tras señalar que “alrededor de las 22.10 del sábado se registró el corte de energía, que inicialmente saca de servicio a distintos alimentadores de la ciudad y al cabo de un par de minutos se produce un corte total”, el director del Organismo Adrián Bertoni, informó que tras hacer el recorrido para determinar las causas, detectaron una problema de “abastecimiento de gas”.

“Es obvio que esa llave de gas estaba en una posición que no era la correcta”, observó el ingeniero Bertoni, quien admitió que “alguien la bajo exprofeso”, y que las responsabilidades las deberá determinar la Justicia.