Ushuaia y la transparencia pública

¿Qué entendemos por transparencia? ¿Qué significa que una gestión municipal sea transparente? Estas son algunas de las preguntas que nos vienen a la mente cuando observamos la gestión que se lleva adelante tanto en el Municipio, como en el propio Concejo Deliberante, organismo que debe ser el contralor de la propia gestión Municipal.

En primer lugar debemos comenzar definiendo que es Transparencia. En ese sentido podemos decir que una gestión es transparente cuando es clara, veraz y objetiva por medio de la ejecución y desarrollo de sistemas de control, fiscalización, probidad y ética con participación Ciudadana.

La transparencia es una actitud cotidiana de aquel que ha recibido un mandato o cumple una función pública, por lo tanto también debe ser considerada como una forma de vida.

Podemos agregar que la transparencia en el ejercicio de gobierno es un deber ético y, a la vez, un deber útil. Es un deber ético porque es un principio normativo, es una exigencia que se presenta en casi todos los momentos de la gestión municipal. Es un deber útil porque su instrumentación hace que la ciudadanía conozca la operación del gobierno local. Es el medio que enlaza ciudadanía y gobierno.

El fortalecimiento de la transparencia, implica un fuerte compromiso social y una colaboración estrecha entre los diferentes poderes del estado municipal. Sin duda alguna es un camino arduo, que durante su recorrido obliga a dejar intereses sectoriales de lado y tomar a la función pública como un compromiso ciudadano que enaltece y que no tiene, ni debe tener prebenda alguna.

Teniendo en cuenta lo expresado anteriormente, llegamos a la conclusión que para que esta gestión sea calificada como transparente, le falta recorrer un largo camino. Y esta no es una afirmación que no tiene sustento, solo basta con observar la realidad que rodea tanto al propio Departamento Ejecutivo como al Concejo Deliberante. Solamente hagamos una pregunta al cualquier vecino de la ciudad: ¿Sabe usted como se utiliza cada peso que llega al Municipio y al Concejo? Además hay una serie de ordenanzas que todavía no se encuentran reglamentadas y hay otras que ni siquiera fueron sancionadas. Tengamos en cuenta que llevamos casi 8 años de gestión en ambos poderes. Del mismo modo hay una serie de Consejos previstos en nuestra Carta Orgánica Municipal que no son convocados con la frecuencia en que deberían serlo.

No basta con proclamar por todos lados que no se es corrupto y que la gestión es transparente, sino que hay demostrarlo con hechos concretos y no con palabras, para lo cual es necesario:

  • Un sistema de información y accesible
  • Mecanismos que permitan controlar la discrecionalidad arbitraria de los funcionarios públicos
  • Mejorar la rendición de cuentas
  • Facilitar la participación ciudadana

 

Sin duda alguna, toda esta serie de medidas, acciones y conductas ciudadanas implican un cambio cultural. Las cuales deben ser iniciadas por aquellos que tienen responsabilidad pública, de lo contrario estamos condenados al fracaso. La transparencia debe ser un objetivo concreto no solo de los funcionarios del Municipio y del Concejo Deliberante, sino también debe ser exigida por la comunidad toda. Caso contrario todo estará cubierto de un manto de sospecha que afectará la propia credibilidad pública.

 

 

Prensa Consolidación Comunitaria 1° de Junio.