La víctima de trata Alika Kinán afirmó hoy por FM Del Pueblo que el proceso de desalojo de la vivienda que le diera en préstamo el gobierno fueguino, a través de Desarrollo Social, sigue en marcha.
“Cuando se reglamentó la ley, de ella se desprende un protocolo de asistencia que fue firmado por el Ministerio de Desarrollo Social, pero jamás se hizo cumplir ni hubo iniciativa para dar asistencia”, expuso Alika, que no fue reconocida como víctima por el gobierno fueguino hasta que su caso trascendió las fronteras y se instaló en los medios nacionales.
Fue allí donde logró una reunión con Ríos y el compromiso del Municipio de darle un terreno para su vivienda, la promesa de fondos de parte de Ríos para comenzar a construirla, y además el acuerdo para desistir del juicio de desalojo.
“Hubo un compromiso en una reunión de parte de la gobernadora de desistir del desalojo y hoy por hoy hay audiencia para este juicio de desalojo, por lo tanto su palabra no tiene validez. Si mis compañeras explotadas de la misma manera que lo fui yo ven esto, ¿cómo puede ser que se reconozcan como víctimas cuando el camino de vuelta es terrible y el estado te está victimizando?”, se preguntó, luego de haber iniciado “un camino de violencia institucional”.
“La misma ministra (Marisa Montero) es la que empuja a una audiencia por desalojo y no corresponde bajo ningún punto, porque están faltando a la palabra, al compromiso. Cómo les puedo creer de esa manera”, planteó.
“Tuve que venir a Presidencia de la Nación para resolver la situación, y estoy haciendo este camino por mis compañeras, para que no pasen por este tipo de situaciones”, indicó, dado que se encuentra en la ciudad de Buenos Aires, invitada a participar de varias actividades.
Fuente: Sur 54